HOMBRES DE NEGRO
Veloces compiten sus sonidos
en sus ojos
van sorbiendo los pueblos
con sus bocas voraces
Traen trepanadoras
como tanques de guerra
abren a tajo puro
el hoyo
de la supuesta libertad.
Van por encima de los mortales
transportados
en trenes de cristal
con impecables trajes negros
se adueñan
mimetizan infiltran
nuestros sangre rendida a sus
venenos.
Buscan cribar los vientres
paridores de asombro
separar las pieles de las
lenguas
al sur del muro largo
que establece su marca
en su patio trasero
extendido hasta el lejano faro
al sur y más allá al sur del sur